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Personal de la brigada de Hurtos de la Seccional 1ª de policía recibió la información de que en las cercanías de la calle Gladiolos iban dos muchachos jóvenes cargando una garrafa de gas de 13 kilos cada uno. Era domingo y el país encaraba las elecciones internas de los partidos políticos.

Personal de Hurtos se desplazó de inmediato al lugar señalado. Al llegar no tuvieron demasiada dificultad para identificar a los dos muchachos. Les detuvieron e identificaron. Eran dos jóvenes de 18 años de edad cada uno, uno M.G.C. y el otro J.M.S. (iniciales de nombre y apellidos).

Cuando les preguntaron de dónde habían sacado las garrafas y qué hacían con ellas, los dos muchachos respondieron simplemente que las habían hurtado de una vivienda cercana a Camino a la Laguna. Identificaron con precisión cómo llegar a la vivienda.

Los jóvenes fueron llevados a la comisaría mientras un grupo de efectivos de la brigada de Hurtos de la Seccional 1ª se desplazaba hasta la vivienda señalada por los muchachos.

Cuando llegaron vieron que había una reja violada y una ventana corrediza forzada. En el patio habían quedado tirados un reproductor de DVD, una campera, y una mochila.

Un poco más tarde se presentó en la comisaría un vecino que afirmó ser el propietario de la vivienda. Llegaba a radicar la denuncia de robo. Le mostraron los efectos incautados en los procedimientos. El hombre reconoció sin dudarlo a todos ellos como de su propiedad.

Notificado el juzgado en lo Penal de 10º turno, la magistrado que entendió en el caso analizó las pruebas, las declaraciones, repasó los interrogatorios, y se pronunció dictando el procesamiento de M.G.C. y J.M.S. como autores de un delito de hurto especialmente agravado. El primero que registran sus prontuarios desde ahora.

La juez estableció que los dos acusados, en función de ser primarios, recobraran su libertad ambulatoria bajo caución juratoria (firmaron el compromiso de cumplir al pie de la letra lo que se les ordena bajo el riesgo de incurrir en desacato).

También dictaminó que los dos deberán presentarse en la comisaría de su barrio, cada semana durante los próximos 60 días, y donde deberán quedar detenidos todo el fin de semana.

zl