Los propietarios del Augusto´s Paissandu decidieron colocar una placa en el hall del hotel recordando que allí pernoctó la selección de Uruguay campeona de 1950 previo a la final ante Brasil en el mítico Estadio de Maracaná, informaron a FM Gente, sus autoridades.
Ubicado sobre la Rua Paissandu en recuerdo a la Toma de Paysandú en Uruguay donde murió entre otros el General Leandro Gómez, el establecimiento inicialmente fue un convento.
En la zona de Flamengo fue uno de los tres hoteles que se acondicionaron para el Mundial de 1950, los otros dos fueron el Gloria y el Novo Mundo.
El Augusto´s Paissandu tiene hoy la misma fachada que hace 64 anos, el mismo piso interior, el mismo ascensor, las ventanas originales y otros aspectos que marcan una época en este caso de gloria para el fútbol uruguayo.
Empero, se informó a FM Gente que se perdieron todos los registros, fotografías y la documentación de aquella jornada.
Esto se produjo hace 40 años cuando el hotel cambió de propietarios.
La placa contendrá información que tomarán de internet. Periodistas de la BBC de Londres, Alemania, España y otros países han investigado en el local buscando detalles de la hazaña de los capitaneados por Obdulio Varela.
Uruguay pernoctó en el sexto piso del hotel, cuenta con siete pisos. Y los relatos boca a boca de los empleados del establecimiento recuerdan como los jugadores uruguayos celebraron en el comedor que prácticamente mantiene la misma fachada.
La placa recordando el hecho histórico se colocará unos días antes del inicio de la justa Mundial.
Empero, se desconoce por los propietarios si las nuevas autoridades de la Asociación Uruguaya de Futbol y el propio Alcides Ghiggia, autor del segundo tanto celeste, concurrirán al evento.
GUIA PARA HACER EL MUNDIAL A LA URUGUAYA
Para viajar en el zona de la Avenida Atlántica y llegar a las playas de Copacabana o Leblón utilizar el subte. Son dos líneas, una roja y la otra verde. La roja con 20 estaciones y una de transferencia o va de Uruguai a General Osorio. La verde de Pavuna a Botafogo cuenta con 26 estaciones. El costo del pasaje son 35 pesos uruguayos el viaje.
Se viaja rápido y a veces especialmente los fines de semana muy cómodo. El boleto de bus sale 30 pesos uruguayos. El litro de gasolina 33.
Para comer es muy variado, para almorzar y cenar podemos tener lugares de 1000 pesos. Pero se puede degustar una hamburguesa con fritas por 120 pesos, una lata de cerveza cuesta unos 50 pesos, caipirinha 120, martini 100, cuba libre 150 el trago y el mojito 220.
Recomendamos no comprar cerveza en los supermercados cuesta prácticamente lo mismo que en los bares, así que se puede dar el gusto bebiendo frente a la playa en los bares que están sobre la costa en la playa de Copacabana sobre la Avenida Atlántica.
La cerveza de litro en los bares varia de 90 a 120 pesos, la medida de whisky lo mínimo 90 pesos uruguayos.
La Coca Cola si sale unos 20 pesos menos que en Uruguay. Un café en un bar en la zona de Copacabana o Leblón alcanza los 60 pesos y un cafe con leche sin nada 100.
No se haga el mimoso, regalar un pequeño ramo de rosas sale 600 pesos nuestros.
Otra recomendación para comer, hay muchos establecimientos estilo espeto corrido que cobran al peso. Los 100 grados de comida varían de 39 pesos a 50 uruguayos.
Un plato bien servido, unos 600 gramos, puede contener salmon, frango (pollo), carne asada, pastas, las más diversas ensaladas y una típica del folklore brasileño, la feijoada.
Allí una botella de cerveza chica sale 45 pesos nuestros y un refresco 40.
LA PELOTA
La pelota oficial del mundial se vende a 200 dólares. Hasta ahora se puede conseguir en muy pocos lugares, uno de ellos es la sede del Flamengo, cuyo equipo lo viste Adidas y expende allí el balón. Sin embargo, la réplica, el mismo balón pero cocida sale 37 dólares.
El diario O.Globo uno de los más importantes de Brasil, recomendó al gobierno de Brasil seguir el ejemplo de Uruguay en relación a la ley de marihuana.
Bajo el título de “exemplo do Uruguai na politica sobre drogas”, sostuvo que es uno de los más eficaces paradigmas en la lucha contra el narcotráfico o consumo de drogas.
Adujo que este flagelo desafía gobiernos y supera las políticas basadas en las acciones de la policía y las fuerzas armadas. Por año, según la publicación, mueren 500 personas como consecuencia de la droga.
Sostiene al compararlo con Uruguay que el gobierno de Brasil confunde la criminalidad con la fragilidad de las políticas sanitarias y públicas en torno a este asunto.
Arguyó que no está en la agenda del sistema político este flagelo y recomendó seguir el ejemplo del gobierno del presidente Jose Mujica